Mary MacLane, que nació en Winnipeg (Canadá), el 1 de mayo de 1882 y murió en Chicago, el 6 de agosto de 1927, fue una escritora estadounidense.
Nació en Canadá, pero se la considera estadounidense por haber pasado casi el total de su vida en Estados Unidos. Su familia se instaló en el estado de Montana, en un pueblo minero llamado Butter, cuando ella tenía ocho años.
¿Y qué hizo MacLane para que se la tome en cuenta?
A los veinte años escribió un diario contando su vida (o imaginando su vida). El libro se llamaba Espero la llegada del Diablo (I await the Devil's Coming). El editor consideró que el titulo era demasiado chocante para la sociedad de ese tiempo y lo cambió por La historia de Mary MacLane (The Story of Mary Maclane), publicado en 1902.
El libro fue un récord de ventas y, por su contenido, implicó un antecedente de la poesía confesional desarrollada décadas después.
En el libro, Mary cuenta su amor por el Diablo, al que ve como un personaje seductor, su atracción sexual por las mujeres y su opinión contraria al matrimonio (frustrante para las mujeres, impidiendo su crecimiento como personas) y el aburrimiento que le provoca todo lo que tiene alrededor.
La franqueza total, le valió ser llamada “La salvaje de Butter”.
Sus libros siguientes, como My Friend Annabel Lee (1903) y I, Mary MacLane: A Diary of Human Days , también, autobiográficos, tuvieron escasa repercusión.
Después de dos décadas de popularidad, en las que llegaron a fundarse los Clubs MacLane, cayó en el olvido.
En los años setenta, algunas escritoras feministas rescataron su obra y la pusieron entre las importantes influencias del feminismo actual.
